Redondito

El título refleja exactamente cómo estoy viviendo estos días y la verdad es que me alegro, porque he estado al 1000%, pero en puras cosas positivas para mí.

Por fin terminé el famoso curso de manejo que me tuvo hiperventilada durante varias semanas. Fui a rendir mi examen y me fue excelente. No tuve ningún error en el teórico, ni el sensométrico. Una pequeña pifia en el práctico, pero nada como para no entregarme mi licencia calientita (literalmente...jajaja).

La más contenta de todo esto (aparte de mi), es mi hermana menor, ya que se ha puesto un poco regalona para que salgamos a hacer rutinas, que acostumbrábamos a hacer a pie y en donde siempre me decía : "podrías manejar...."

Hasta la fui a dejar a su colegio en el centro. Si es complicado manejar para allá, imagínense en la mañana. Yo estaba con el culo a dos manos porque ya veia que un micrero o un huevón acelerado me dejaba hecha bolsa, pero gracias a Dios nada de eso pasó.

Otro hecho importante es que por fin me gradué. Tuve una ceremonia super bonita en la Casona de Las Condes con cantante soprano y un cuarteto musical que tocaba violines, violonchelo y flauta traversa. Realmente bonito.

Los discursos fueron un poco lateros (típico), pero al menos fue rápida la entrega del diploma.

A esta titulación se suma la de mi pololo, que aprobó hace poco su examen de grado y le entregan su diploma el próximo 16 de este mes.

Estamos super contentos los dos, porque finalizamos una etapa super importante y casi al mismo tiempo.

Uno de los regalos que le hicieron a mi pololo y que me involucra a mi, es que su mamá le ofreció un viaje a Buzios para que nos vayamos los tres y así celebrar a los dos nuevos profesionales.

La verdad es que es una buena excusa para arrancarse unos días, así que nos vamos del 21 al 30 a tomar unas buenas caipiriñas y a broncear nuestros pálidos cuerpos.

Entremedio de esto, me llamaron para dos entrevistas de trabajo y hay buenas posibilidades, así que estoy super contenta y espero que todo siga REDONDITO.