Con el vestido de novia en la cartera?!!!

¿Por qué será que la mayoría de los hombres piensa que nosotras vivimos esperando un príncipe azul que nos "rescate" de nuestras "aburridas" existencias?

"Es que los tiempos han cambiado mucho" es la típica frase que le he escuchado a personas mayores y si me detengo a analizarla, tiene mucha verdad.

Hoy la mujer es más independiente, estudia en la Universidad y tiene la posibilidad de trabajar a la par de un hombre...el ejemplo más claro es el que tenemos en casa, que es tener una presidenta mujer y con eso ya podemos hacernos una idea de cómo ha evolucionado el tema a través de los años.

Antes la mujer sólo estaba para cuidar la casa, atender al marido, arreglar las cagadas que dejaba el resto y ser una máquina para parir hijos. Iban al matadero jovencitas y se aprestaban a una vida muchas veces plana y rutinaria.

Hoy la mujer es más libre y goza esa libertad como si hubiese estado presa durante muchos años. Toma, fuma, dice garabatos y baila apretado... y qué tanto.

Esta sociedad es la que se ha encargado de generar estereotipos, que después sirven para criticar nuestras conductas.

Ni hablar de los hombres, porque si desde siempre han tenido carta blanca para hacer lo que se les antoje, hoy día es peor. Es difícil encontrar hombres respetuosos, con buenos valores familiares y de buena crianza y ¡ojo! eso no significa un hombre mamón o pastel, sino que para mi gusto un HOMBRE de la H a la E y que parece ser una especie en extinción. Yo no tengo de qué quejarme, pero sí me doy cuenta a través de mis amigas, cuando les abundan los patanes que sólo quieren sexo fortuito y "si te he visto no me acuerdo". Las he visto llorar, patalear y maldecir contra esta "especie" que sólo tiene desarrollado el instinto carnal y del carrete desmedido. (Al que le quepa el sombrero, que se lo ponga).

Para qué estamos con cuentos, también hay varias "señoritas" de dudosa procedencia, que han adquirido las características típicas de esta condición, de estar a la par con los varones. Se han puesto más deshinibidas, despreocupadas y libertinas, en buen chileno, perras... Y son perras, porque no son hombres para andar con una y con otra. En el hombre esa actitud es ser "bacán".

Por eso creo que más que estar desesperadas por casarse con alguien, es más bien, las ganas de conocer la media naranja, de encontrar un compañero que nos entienda, aprecie, respete y viceversa. Creo que el hombre necesita tanto a la mujer, como nostras al sexo opuesto, es algo inevitable.

Así que al menos yo, no estoy desesperada a la espera de un anillo de compromiso. Tengo mis proyectos, planes y anhelos que espero cumplir, además si siento que ha llegado el momento, tal vez yo misma haga la propuesta matrimonial... quién sabe, total "los tiempos han cambiado mucho".